Hace veinte años, la industria de la música cristiana estaba en vísperas de un cambio radical que rompería récords, desmantelaría estilos aceptados de música y sentaría las bases para convertirse en uno de los géneros de más rápido crecimiento en la historia de la música. ¿Qué tal eso para una introducción dramática?
El año 1995 — sólo una pocas décadas atrás de nosotros — marcó el comienzo del tercer movimiento más importante en la historia de la música cristiana.
El Movimiento de Jesús [The Jesus Movement]
El primer movimiento fue el comienzo de la industria a finales de los ‘60s y principios de los ‘70s, que brotó del “Jesus Movement”, una rápida difusión del cristianismo que se inició en la costa oeste de los Estados Unidos y se extendió por toda América del Norte y Europa.
Los miembros del movimiento, en su mayoría procedentes de la contracultura hippie de la época, fueron llamados “Jesus People”, o “Jesus Freaks” (más al respecto en un momento). En la estela del movimiento surgieron una serie de nuevas denominaciones, iglesias y la introducción de la “música de Jesús” [Jesus Music] — que tomó la música de la época y le infundió letras centradas en Dios.
Artistas como Keith Green, Love Song, Resurrection Band, Second Chapter of Acts y Larry Norman (en la foto) encontraron fácilmente un público que se reuniría en todo Estados Unidos bajo carpas gigantes y difundiría su música de manera rápida a través del movimiento.
El escenario estaba listo para los sellos de música cristiana moderna, y en 1970, Larry Norman produjo y lanzó dos álbumes en One Way Records. Maranatha! Music, un sello de alabanza y adoración que sigue activo hoy en día, se inició poco después de eso en 1971.
A medida que el Jesus Movement comenzó a desaparecer a mediados de la década de 1980, el acuerdo de negocios entre los artistas y los sellos se encontraba en plena floración, y artistas como Amy Grant y Rich Mullins, que crecieron descubriendo a los primeros artistas, con el deseo del país por más música que honrara y apoyara su creciente fe. Se establecía la segunda etapa que impulsaría la industria con fuerza en la década de los ‘90s.
Y entonces todo cambió. De nuevo.
El Comienzo de SoundScan
Una industria que había sido dominada por la CCM (música cristiana contemporánea, estilo contemporáneo adulto) durante una década y media estaba a punto de recibir una gigantesca sacudida de energía. Desde la introducción de las listas de SoundScan, pasando por las adquisiciones de sellos cristianos, a la atención de los medios de comunicación general, 1995 estuvo lleno de momentos culminantes para la música cristiana.
En abril de 1995, SoundScan comenzó a monitorear las ventas en los puntos de compra de productos cristianos al por menor. Los Billboard 200, una planilla semanal de ventas de música, incorporó las ventas de las librerías cristianas (conocida como la Asociación de Libreros Cristianos, o CBA) por primera vez en su fascículo del 9 de septiembre.
¿La razón? El muy esperado nuevo álbum de Michael W. Smith, I’ll Lead You Home, fue un gran éxito, vendiendo más de 51.000 ejemplares en las tiendas afiliadas a la CBA solamente, lo suficientemente bueno para el Nº16 en los Billboard 200.
Álbumes de Ray Boltz, Ron Kenoly, Petra y el proyecto multi-artistas My Utmost For His Highest, también debutaron en la cartilla. La música cristiana estaba siendo reconocida, por primera vez, como un medio vendible junto con los proyectos de la corriente principal.
Este año histórico establecería el tono para la música cristiana que haría historia en las listas a partir de entonces. R.I.O.T. de Carman debutó en los Billboard 200 en el puesto número 45 el 18 de noviembre y artistas como Point of Grace, Kathy Troccoli, Newsboys, Steven Curtis Chapman, 4Him y más también aparecerían.
El Álbum Que Cambió Todo
Pero el lanzamiento del álbum Jesus Freak de dcTalk el 21 de noviembre de 1995 eclipsó las expectativas de todos, vendiendo la cantidad sin precedentes de 85.814 unidades en la primera semana de lanzamiento, y logrando ser el álbum más vendido alguna vez en la primera semana, para un álbum cristiano. Alcanzó el puesto número 16 en The Billboard 200 y fue uno de los cinco debuts más altos de esa semana, junto con los nuevos álbumes de los Beatles, Garth Brooks, Bruce Springsteen y Vince Gill.
Mucho Dinero Derramado
Esta fue la validación para quienes controlaban las grandes sumas de dinero detrás de la industria de la música, y en pocos meses, cientos de millones de dólares estarían siendo vertidos en la música cristiana, lo que transformaría para siempre el paisaje y sentaría las bases para la masiva y diversa alineación de artistas que disfrutamos hoy.
Los sellos de música tradicionales comenzaron con la adquisición de sellos cristianos pequeños e independientes. Los “Tres Grandes” — EMI (ahora Capitol Music Group), Warner y Sony — de repente tuvieron una participación financiera en la música cristiana, y la explosión fue increíblemente rápida.
Mientras el dinero aumentaba, también los hacía la calidad de la música que era producida. Eso abrió oportunidades en el mercado general que la música cristiana rara vez tuvo antes, ampliando la base de fans. Y más de esos fans asistieron a giras y festivales más grandes y más elaborados, financiados por una avalancha de patrocinadores deseosos de estar frente a la creciente audiencia.
En el año siguiente, el pop/rock cristiano, un sub-género que apenas existía hace doce meses, tomó la posición frontal y central. Jars of Clay se convirtió en un gran éxito en 1996 cuando su sencillo “Flood” hizo estallar las puertas que separaban la música cristiana y de la corriente principal.
The Freak Show Tour de dcTalk despegó el mismo año y los introdujo en la historia del Rock Cristiano como la banda más grande de todos los tiempos en el género. Bloom de Audio Adrenaline fue lanzado y ellos se unieron a dcTalk de gira, consolidándolos como un nombre de la casa que todavía existe hoy en día. Newsboys lanzó Take Me To Your Leader y los catapultó al estrellato.
1995 fue un año muy emocionante, que produjo algunos discos increíblemente memorables que realmente prepararon el escenario para las próximas dos décadas.
[Escrito por Kevin McNeese para NewReleaseToday.com. Usado con permiso.]