Para concluir con el tema titulado La Próxima Generación, existen tres desafíos para esta generación que necesitamos identificar si deseamos ser efectivos en nuestra misión:
El Desafío del Discipulado
Cuando Jesús habló de la gran comisión, no solo dijo “vayan… y prediquen la Buena Noticia” (Marcos 16:15 NTV), sino que añadió “hagan discípulos” (Mateo 28:19 NTV).
Un discípulo es un aprendiz o alumno de un maestro. En los tiempos bíblicos, los paganos de Antioquia se referían en forma burlona a los cristianos como los del partido de Cristo (Biblia del Discípulo, 2013). La palabra en griego es mathetes y significa “uno que aprende”.
La responsabilidad de hacer discípulos no inicia en la iglesia, sino en el seno del hogar. Como padres, nos convertimos en maestros de nuestros hijos/as. Nuestro llamado es amarles y disciplinarlos — que es de donde viene la palabra “discípulo”. Luego la iglesia, escuela y la comunidad se hacen partícipes en el proceso de criarlos en el temor de Dios.
La Palabra nos dice en Hebreos 12:9-10:
9 Ya que respetábamos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, entonces, ¿acaso no deberíamos someternos aún más a la disciplina del Padre de nuestro espíritu, y así vivir para siempre?
10 Pues nuestros padres terrenales nos disciplinaron durante algunos años e hicieron lo mejor que pudieron, pero la disciplina de Dios siempre es buena para nosotros, a fin de que participemos de su santidad.
La Generación de No Cristianos
Hoy en día la generación de los milenarios. Esta es la generación de la justicia social; elevan las necesidades físicas sobre las necesidades espirituales; hacen preguntas y cuestionan porque deben desarrollar una labor; consumen e interactúan con otros que consumen; están conectados las 24 horas todos los días; y no se llevan bien con las jerarquías.
Los milenarios representan una generación parecida al libro de Jueces: una generación que no conoció a Dios. Los tres gigantes que enfrenta esta generación son: el humanismo (la cultura del yo), el Dios del materialismo (vales por lo que tienes) y el post modernismo (la apertura a todo tipo de idea y la negación de los valores absolutos).
Los Cristianos
El problema de la Iglesia a través de la historia es que ha sido compuesta por los que son, los que no son y los que aparentan ser. Creo que el problema que enfrenta esta generación de cristianos es si de veras conocen a quien dicen servir.
No me mal entiendas; creo que hay creyentes sinceros que aman a Dios. El problema radica en que por falta de una sana doctrina, muchos han caído en el error de pensar que porque asisten a la iglesia automáticamente son salvos.
Por otro lado, la cultura del “yo” ha alcanzado una popularidad increíble, donde hacemos comparaciones de quién canta o predica mejor por medio de mi último post y la cantidad de likes que recibo. El reto es inmenso, pero tenemos un Dios grande que nos ha dado su Palabra para transformar los corazones de esta generación de vuelta a Cristo.
Preparemos para el Señor una generación bien dispuesta. Necesitamos levantar una generación como Elías con las siguientes características: una generación que viva en la presencia de Dios y de acuerdo a la Palabra, que no claudiquen entre dos pensamientos, y que oren y dirijan a otros a la verdad de Jesús.
Honestamente creo que aún hay esperanza, mientras haya líderes y seguidores con un corazón para Dios. Oro que muchos se unan a esta revolución porque la próxima generación nos necesita.
LUCAS 1:17 NTV
17 Será un hombre con el espíritu y el poder de Elías; preparará a la gente para la venida del Señor. Inclinará el corazón de los padres hacia los hijos y hará que los rebeldes acepten la sabiduría de los justos.